La Pachamama la diosa de las cosechas
No cabe duda que los pueblos de Latino América cuentan con una gran diversidad de creencias, historias, mitos, y leyendas. Siendo esto una gran parte que caracteriza sus tradiciones y costumbres en ciertas celebraciones. La Pachamama para muchos no es solo una leyenda sino una forma de ver la vida, una herencia que se le ha dejado a los grupos étnicos andinos y entre otros hasta hoy en día. La Pachamama es la madre tierra una diosa que se encarga de proteger a la naturaleza. En su definición etimológica en la lengua quechua pacha significa “mundo, tierra, universo” y mama significa “madre.”
La Pachamama para muchos es la oportunidad de estar en contacto con la naturaleza. Se sabe que ella no tiene un lugar situado específicamente pero se le puede encontrar en lugares como manantiales, apachetas o vertientes. La Pachamama puede ser muy generosa con las personas o los creyentes de ella y para muchos de sus fieles seguidores es necesario brindarle tributo. Pero hay quienes incluso creen que es necesario brindarle tributo si se ha cometido una falta en contra de la tierra porque aunque es generosa puede llegar a castigar, haciendo que las cosechas en la tierra no crezcan. Una de las formas de hacer esto es por medio de rituales ancestrales brindando ofrendas como en forma de agradecimiento. Unas de las ofrendas más tradicionales que se le da es la hoja de coca. El primero de agosto ha sido tomado como el día oficial para conmemorar a la Pachamama pero hay lugares que incluso la celebran todo el mes de agosto.
Hoy en día la celebración de esta deidad ha cambiado en ciertos aspectos durante el transcurso del tiempo. Se sabe que antes se sacrificaban animales en su honor pero hoy en día esto no es así. También la celebración de la Pachamama se ha llegado a mezclar con creencias religiosas como con el catolicismo en ciertos lugares de Sudamérica.
Brenda Gonzalez.